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Mucha gente piensa que Mallorca es un destino de verano, lo que no saben es que es posible disfrutar de la isla los 365 días del año. Mallorca goza de un clima y de un paisaje que la hace única. Si te gustan los deportes de aventura, pasear por pueblos encantadores, descubrir qué se esconde en las profundidades de la isla o disfrutar de playas paradisíacas en solitario. ¿Te animas a descubrir todo lo que puedes hacer en invierno en Mallorca?
No se me ocurre mejor plan para el invierno de Mallorca que caminar a través de calles empedradas las cuales esconden rincones preciosos. Valldemossa, Deiá, Soller o Fornalutx son pueblos que no puedes pasar por alto en tu escapada por la isla. La ubicación de los 4 pueblos no puede ser mejor, en el corazón de la Serra de Tramuntana y con vistas al mar en algunos de ellos.
Están ubicados a tan solo 20 minutos de Palma, por lo que si te alojas en la ciudad y estás un finde semana, es perfecto para ir y volver en el mismo día.
Una de las especialidades gastronómicas de Mallorca es la coca de patata, una especie de bollito salado que puedes acompañar con la bebida que tu quieras, en invierno un chocolate caliente es el complemento ideal. En Valldemossapresumen de tener la mejor coca de patata, y es totalmente cierto, acércate a Ca’n Molinas a degustarlas.
Sé lo que estarás pensando, que se me ha ido la cabeza. ¡Ni mucho menos! En Mallorca es posible remar en kayak o paddle surf durante todo el año, lo único que varían son las capas de ropa que te pongas.
¿Cuáles son las ventajas de navegar en temporada baja? Menos barcos y motos de agua, mucha menos gente en las playas, el mar no está tan movido como en verano y el viento es más estable durante todo el día.
Algunas de las mejores rutas para hacer en otoño son:
Mallorca es un paraíso para los senderistas, con la presencia de la Serra de Tramuntana, el Península del Levant y los senderos que transitan por la costa, ¡hay rutas para todos los gustos y niveles! Las mejores épocas para caminar por Mallorca son de Otoño a Primavera, en verano el calor aprieta demasiado para hacer rutas de senderismo largas o de nivel moderado, como mucho caminatas para llegar a calas vírgenes.
Una gran parte del turismo que acude a la isla es para realizar el GR221, conocido como Ruta de Piedra en Seco. Se divide en 8 etapas, empezando en Port d’Andratx hasta Pollença, o viceversa, con un total de 132 kilómetros, es decir, recorrerás Mallorca de punta a punta. La mayor parte de los senderos transcurren por senderos empedrados, de ahí su nombre. Durante el recorrido no solo se camina por la montaña, si no que atravesarás pueblos donde podrás disfrutar de buena gastronomía y de contemplar la arquitectura tradicional de Mallorca.
Una de mis zonas favoritas para caminar es el Península del Llevant, no es una zona muy conocida, y la recompensa es inmejorable, pues se accede a algunas de las calas más vírgenes de la isla.
Que sí, que el verano mola porque te puedes bañar en el mar y tirarte horas viendo peces o simplemente flotando, pero lo harás junto a 30 barcos y 200 personas. Quizás he exagerado, pero no ando muy lejos. Del otoño y del invierno lo que me gusta es ir a mis playas favoritas con un libro, la toalla, el bañador porque nunca se sabe y disfrutar tranquilamente del paso de las horas.
La playa de Es Trenc por ejemplo es una playa perfecta para los meses más fríos, pues podrás pasear por su kilométrica orilla sin tener que saltar por encima d personas.
Voy a ir más allá aún para que te animes a visitar Mallorca en otoño, y es que en verano muchas playas están cerradas por carretera y solo es posible el acceso en bus o en barco, tal es el caso de la Playa de Formentor.
Cada vez que llega el mes de Octubre y voy a ver el atardecer en Mallorca siempre pienso lo mismo, «los colores en otoño son más espectaculares que en verano». Y así es, ir a ver la puesta de sol en temporada baja en Mallorca es una de las mejores cosas que hacer. Puedes disfrutar de unas vistas inmejorables, con mucha menos gente alrededor que si fuera pleno verano ¡todo ventajas!
Es posible ver el atardecer desde numerosos faros, playas o miradores, y cada lugar es verdaderamente especial. Entre mis favoritos está la Talaia d’Albercutx, donde se pone el sol en la Serra de Tramuntana, en Sant Elm con el islote de Sa Dragonera de fondo o en las Islas Malgrats.
Cerca de la localidad de Artá, se encuentra una de mis playas favoritas de Mallorca, Cala Na Clara. Si tuviera que descubrirla con tres palabras: piscina gigante turquesa. Esta playa es un sueño, con las montañas del Llevante protegiendo la costa, ofrece una de las postales más bonitas de Mallorca.
La playa apenas tiene arena, la orilla es más bien de rocas, con una sombra agradable a partir de mediodía. El camino hasta bajar la playa, apenas 15 minutos, es maravilloso.
Si te gusta el mundo camper o tienes curiosidad por vivir esta experiencia, Mallorca es perfecto para ello. Imagínate durmiendo con vistas a playas vírgenes rodeado de naturaleza y en soledad. ¡El auténtico paraíso! Podrás recorrer la isla tranquilamente, pernoctando cada noche en un lugar diferente.
A mí personalmente es una de las maneras en las que más me gusta descubrir la isla, es otro estilo diferente de viajar y se aprecia cada detalle mejor.
Para buscar lugares donde dormir recomiendo mirarlo en la app de Park4night, y leer atentamente los comentarios para no meterse en caminos dignos de 4×4.
Visitar las cuevas de Mallorca es adentrarte en un mundo que parece de otro planeta. Por suerte hay cuevas para todos los gustos, podrás visitar las Cuevas del Drach o las Cuevas del Hams, cuevas preparadas para el visitante durante todo su recorrido. Si prefieres adentrarte en cuevas más vírgenes también podrás hacerlo, tanto desde el mar como desde tierra, aunque siempre y cuando tengas experiencia previa. Por ejemplo la excursión que va a Sa Cova Tancada es de dificultad media y el interior de la cueva es espectacular, y es bastante sencillo desenvolverse en su interior.
Por supuesto no te puedes ir de Mallorca sin ver con tus propios ojos lo bonito que es Palma. Pasear por sus calles, admirar su catedral por dentro y por fuera, probar la gastronomía en los restaurantes frecuentados por los locales, hacer un free tour para conocer su historia, ¡y mucho más! Porque puedes pasar un día entero tranquilamente realizando numerosas actividades.
Sé que te va a sonar extraño, pero cuando llueve mucho, en Mallorca se forman cascadas en la Serra de Tramuntana, haciéndola aún más bonita de lo que ya es. Esta época es la mejor para hacer actividades como barranquismo, y descubrir el verdadero corazón de las montañas.
Si no has experimentado aún qué se siente al descender por cascadas o al hacer rapel te animo a ello, a mí siempre me gusta describirlo como un parque acuático pero natural, por lo que es más divertido aún. ¿Te animas?
Una de las mejores maneras de conocer una isla es a través de los free tours y de actividades únicas, a continuación os dejo un listado de las mejor valoradas en Mallorca.
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