RUTA A UNA DE LAS CALAS MÁS BONITAS DE MALLORCA: CALA MARMOLS

Cala Marmols, es una playa virgen localizada en el sur de la isla de Mallorca. Su nombre nos adelanta lo que nos vamos a encontrar al llegar allí: arena y rocas blancas, que junto con el pino mediterráneo crean un contraste espectacular. Sin duda, es una de las playas más bonitas y con menos ocupación de toda la isla. ¿Por qué será?

1. Dónde aparcar en el Faro de Ses Salines

Si comenzamos la ruta desde el Faro de Ses Salines, la única opción para llegar es en coche o moto. Ahora bien, no hay ningún área de aparcamiento habilitada, si no que los vehículos se estacionan en los arcenes de la carretera que conduce hasta el faro.

No hay ninguna prohibición que indique lo contrario, por lo que se puede estacionar el vehículo y ponernos en marcha sin ningún inconveniente.

Las playas más bonitas de Mallorca

Cala Marmols desde los acantilados

2. Cómo llegar a Cala Marmols

Si no somos propietarios de un kayak o de un barquito, solo nos queda una opción para llegar hasta Cala Marmols: a pie. En este post voy a hablar sobre el sendero que parte del faro de Ses Salines y acaba en la cala, si bien hay otra opción, que sería empezar en Cala S’Almunia,  en dirección opuesta. La distancia para ambos trayectos es muy similar, pero como enamorada de los faros, me decanté por la primera alternativa.

  • Distancia: 11 km ida/vuelta

  • Tiempo: en torno a 1:15 o 1:30, cada trayecto.

  • Dificultad: es un sendero fácil.

  • Recomendaciones: durante el camino apenas hay sombra, recomendable llevar mucha agua y una gorra. Lo mejor sería comenzar a andar a primera hora del día.

  • Calzado: realizar el trekking con un calzado adecuado, no ir en chanclas, porque el sendero tiene algunos tramos de rocas bastante puntiagudas.

Faro de Ses Salines al amanecer

Faro de Ses Salines al amanecer

Tras dejar el coche, ponemos rumbo al faro para contemplarlo más de cerca y leer acerca de su historia. Es una maravilla la ubicación que tiene, muy próximo a las aguas cristalinas y en frente de la Isla de Cabrera. El Faro de Ses Salines se inauguró en 1863, y ha sido el primer faro en utilizar la energía solar para su suministro en los años ochenta.

Es muy común ver a los mallorquines bañándose en esta zona de la isla, ¡cómo para no! Sin embargo, nuestro objetivo estaba algo más lejos.

Después de disparar numerosas fotos al faro de Ses Salines, nos dirijimos hacia la derecha, pues en el otro sentido se encuentra Cala Es Cargols. El sendero va en todo momento muy próximo a la costa, teniendo la opción de ir por la tierra o por las rocas para poder contemplar más de cerca los acantilados que nos regala esta zona.

Al poco de empezar a caminar nos encontramos con una pequeña playita de arena blanca la cual nos pilló de sorpresa por no esperárnosla. Sin duda alguna, está apuntada para volver en verano y disfrutar en soledad.

Playita de arena blanca

Playita de arena blanca

Continuamos caminando bastante pegados a la costa, sin dejar de asomar de vez en cuando la cabeza para quedarnos embobados con el color turquesa del mar. En mi cabeza no puedo dejar de pensar que esta ruta la siguiente vez la haré en kayak para explorar cada cueva que se ve desde los acantilados.

Playita de arena blanca

Formaciones rocosas en los acantilados

Cuando llevamos más o menos la mitad de camino, se abren dos caminos diferentes. Cualquiera de los dos nos lleva hasta Cala Marmols, no te preocupes.

¿Qué opción es más recomendable? Para atravesar la finca hay que bajar y subir por una pendiente bastante pronunciada, agarrándonos de las manos en las rocas, para conseguir mejor apoyo en numerosos puntos. Por lo que igual ésto no es lo mejor si no se está seguro, se va con niños o muy cargado. El otro sendero no presenta esta complicación, por lo que igual es más accesible.

Nosotros decidimos cruzar la finca, para así seguir yendo pegados a la costa y poder admirar los rincones que se forman en el mar.

Las playas más bonitas de Mallorca

Vistas desde los acantilados

Poco a poco el camino va volviéndose más ascendente hasta que llegamos a la cima de los acantilados desde donde se tiene la vista más hermosa de Cala Marmols. Independientemente del camino que hayas elegido, llegarás hasta aquí, ya que es donde comienza la bajada hasta la cala.

Las playas más bonitas de Mallorca

Cala Marmols desde las alturas

Me aventuro a decir que el tramo más complicado es el que nos lleva hasta pisar la arena, pues hay que ir bajando entre rocas un poco resbaladizas. ¡Pero nada que con cuidado no se pueda hacer! Poco a poco vamos viendo cómo una de las playas más bonitas de Mallorca está más cerca de lo que pensábamos. Hasta que por fin ponemos un pie en la arena mojada.

Aguas cristalinas de Cala Marmols

3. Servicios en Cala Marmols

Cala Marmols es completamente virgen, sin urbanizaciones a la vista, ni ningún tipo de edificación. Esto quiere decir que tenemos que salir de casa con todo lo necesario para realizar esta ruta, pues una vez lleguemos al faro, no vamos a poder comprar nada. ¿Qué llevar?

  • Llevar mucha agua, en verano lo ideal es llevar una botella congelada y otra de la nevera. ida/vuelta
  • Después del pequeño sendero a recorrer llegarás con ganas de pegarte un buen festín, así que no te olvides de llevar comida.
  • La crema solar y una gorra son esenciales para no quemarnos.
  • Lleva bien cargados tus dispositivos electrónicos, ¡querrás hacer fotos del paisaje cada dos pasos!.

  • Las gafas de snorkel en verano son obligatorias.

  • Un buen libro para leer en este paraíso.

Playas más bonitas de Mallorca

Disfrutando en el paraíso

4. El camino continúa

Si te apetece seguir recorriendo esta parte de Mallorca, puedes seguir caminando 5 kilómetros más desde Cala Marmols y llegarás hasta Caló des Moro y Cala S’Almunia, consideradas como las playas más bellas de la isla.

Cala S'Almunia