ESPECTACULAR TREKKING EN LUANG NAMTHA

Normalmente, Luang Namtha es el destino de la gente que quiere vivir una experiencia diferente, bien sea una excursión en kayak por la jungla, una paseo, conocer las aldeas que habitan en plena jungla, o hacer un trekking de varios días.

¿Por qué me decanté?

Por realizar un trekking de 3 días, que incluía bosques de bambú, jungla y aldeas perdidas. Si hubiera ido en la época de lluvias, hubiera escogido también la opción de kayak, pero el río no estaba en su mejor momento.

que ver en Laos

1. Seleccionar la agencia

Tras visitar las diferentes agencias que se encuentran en la calle principal “Main Street” me decidí por Green Discovery Laos. Tenéis la opción de hacer el trekking vosotros solos con el guía, o bien, podéis estar abiertos a que se una más gente (de hecho, si paseáis por las diferentes agencias, éstas suelen tener pizarras en las entradas indicando si se va a realizar algún tour esa semana, grupos, y si hace falta más gente). A mí me daba igual si se unía más gente, pero como fui con menos de 24 horas de antelación, finalmente fui sola.

¿Qué paquetes son los más habituales?

  • Excursión de 1 día: se realiza un trekking entre los bosques de bamboo, o un descenso en kayak por el río. Lo que decidáis.
  • Excursión de 2 días: esta es quizá la opción que más escoge la gente. Te permite adentrarte más en la jungla y poder dormir en ella.
  • Excursión de 3 días: esta opción es la que elegí. El primer día y medio te adentras en la jungla y duermes en ella, y el tiempo restante visitas las villas que viven a los pies de la gran jungla, durmiendo la segunda noche en una villa.

  • Agencia: Green Discovery Laos.
  • Precio: 120 €/persona los 3 días.
  • Comida: en el precio se incluye comida y bebida. ¡No tenéis que llevar nada!
  • Alojamiento: la primera noche se duerme en una casita de madera en mitad de la jungla, y la segunda noche en una cabaña de madera en la aldea.

  • Dificultad: Debido a la cantidad de horas que se andan en la jungla, debéis estar en buena forma física.
  • Una parte del dinero que se paga va destinado a ayudar a las aldeas (nosotros vimos cómo se les entregaba dinero a cada aldea que visitábamos)

2. Qué meter en la mochila

Para empezar, os aconsejo que cada persona lleve su mochila, así como que sea amplia, pues cuando llegáis a la agencia os van dando cosas que vais a tener que transportar.

  • Buen calzado para andar, y además calzado de agua, pues atravesaréis arroyos.
  • La ropa que consideres oportuna, tened en cuenta que por el día hace mucho calor, y por la noche refresca bastante. No os aconsejo cargar con mucha ropa, con la justa solo, al final van a ser muchas horas cargando con la mochila.
  • Neceser con las cosas básicas, no hay ni duchas ni nada parecido, así no os molestéis en cargar con champús o cosas así.
  • Crema del sol, spray antimosquitos y afterbite. ¡¡¡Quizá esto es lo más importante de todo!!!
  • Una buena linterna.

Que hacer en la jungla de Luang Namtha

Día 1: Luang Namtha – Jungla

A primera hora de la mañana puse rumbo a la agencia, donde me esperaba el guía y el chofer, que nos llevaría hasta el inicio de la ruta.

El guía muy simpático desde el primer momento, además que pude aprovechar a preguntarle mil cosas durante todo el viaje sobre la cultura, curiosidades, así como cosas que me habían llamado la atención durante mis días en Laos. Además, me enseñó algunas palabras y expresiones en laosiano, y muchos juegos tradicionales.

En este primer día, nos acompañarían dos “local people” (gente de las villas) que se unieron nada más llegar a la aldea desde donde daría inicio nuestra ruta. Ellos eran los encargados de transportar la comida, así como de conseguir comida de la propia jungla. La verdad es que era increíble ver como se desenvolvían en su terreno y cómo escalaban los árboles.

Antes de ponernos a andar, cruzamos el río en una barquita de madera que nos llevó hasta la orilla donde comenzaría el trecking. Estos primeros metros, los hicimos con zapatillas de agua, hay que ir cruzando diversos arroyos, y es más cómodo y rápido. Una vez que nos adentramos en la jungla, y cambió el terreno, ya nos calzamos nuestras deportivas.

La jungla era una maravilla, todo verde, todo esplendor, solo acompañados del ruido de las aves. La primera comida que hicimos nos llamó mucho la atención, la hicimos sobre hojas de bananero, y consistía en arroz, tortilla y bambú en ensalada. La verdad que todo estaba riquísimo.

Que hacer en Laos

Tras la parada de la comida, nos pusimos a andar de nuevo, ahora ya adentrándonos en los bosques de bambú. Durante todo el recorrido aprendimos un montón, sobre plantas, cómo conseguir agua en la jungla, las utilidades del bambú,… Y así, sin darnos cuenta, llegamos al que sería nuestro campamento aquella noche: una casita de madera.

Antes de empezar a preparar la cena, nos dimos un baño en una poza que había cerca para cambiarnos la ropa y prepararnos para el fresco de la noche.  La cena nos la prepararon entre el guía y los local people, y les fuimos ayudando mientras nos enseñaban cómo usan la materia prima de la jungla para preparar una cena. Además, nos enseñaron a cocinar el famosos sticky rice.

Durante este ratito, uno de ellos, nos talló unos vasos de bamboo, los cuales aún conservamos. La cena fue muy agradable, y encima estaba super rica. Al terminar nos quedamos contando historias y cantando canciones típicas de nuestras ciudades, hasta que decidimos irnos a dormir.

TREKKING LUANG NAMTHA

Cocinando sopa en un tronco de bamboo.

TREKKING LUANG NAMTHA

Tallando vasos de bamboo.

Nuestra cabaña en mitad de la jungla.

Día 2: Jungla – Poblados

Tras un desayuno bien contundente, tocó despedirnos de los “local people” que nos acompañaban, se volvían a su aldea. Fue una experiencia muy gratificante el poder pasar el día con ellos.

Este día nos esperaba una caminata de varias horas hasta que llegáramos a la aldea en la que dormiríamos aquella noche.

Una vez vislumbramos la aldea, el guía me dirigió a la cabaña dónde dormiríamos aquella noche. Y sin darnos cuenta, comenzaron a llegar niños a visitarnos con un montón de pulseras y bolsos hechos por ellos mismos para ver si queríamos comprarles algo. Y alguna pulserita cayó.

Tras instalarnos, nos fuimos a bañar en el río, en el que también estaban los niños, aunque eran un poco tímidos, y se fueron yendo poco a poco, dejándonos solos.

TREKKING LUANG NAMTHA

Eligiendo qué pulseras comprar.

TREKKING LUANG NAMTHA

Niños después del baño.

La tarde la destinamos a visitar la pequeña aldea, sus gentes, casas,… Y no paraba de sorprenderme todo lo que veía, acribillé al pobre guía a preguntas. Tendría mil historias para contaros de aquella tarde, pero tampoco os queremos aburrir, así que mejor os dejamos unas imágenes, que, en ocasiones, explican mejor que las palabras.

Por la noche vinieron a prepararme la cama, pero es algo a lo que no estoy acostumbrada, y me sentí muy mal, acabé pidiéndole por favor que lo hacía yo jeje

La cena de esa noche consistió en revuelto con patatas fritas (y por supuesto arroz). ¿Una cena común en España verdad? Pero para esta aldea, que nunca había visto patatas fritas, les picó la curiosidad y vinieron en busca de patatas fritas. Fue un rato súper divertido,

Tras un largo día, ya tocaba irse a dormir, y lo hicimos acompañados del sonido de las ranas y los grillos.

Día 3: Poblados – Jungla – Luang Namtha

Tercer y último día de trekking. Lo comenzamos acercándonos a ver a los niños en los entornos del colegio. Nos sorprendió que estaban allí una hora antes de que dieran comienzo las clases, pero claro, tampoco tenían más que hacer. No quise entrar dentro de la escuela para no romper su dinámica, pues que cada día vengan extraños a molestarte no debe ser muy agradable.

Tras el desayuno, tocaron las despedidas, y poner rumbo a nuestro destino final. Después de 15 minutos andando, llegamos a la siguiente aldea, pero en esta solo estaríamos de paso. A pesar de estar media hora, nos dio la sensación de que eran mucho más agradables que la anterior aldea. Llegamos justo en la hora en la que los peques estaban en el cole, por lo que no tuvimos ocasión de interactuar mucho.

Como dato curioso deciros, que a pesar de estar a 1’5 km una aldea de otra, cada una habla una lengua, por lo que la comunicación la tienen difícil.

Después de aprovechar esta parada para comprar agua, retomamos la caminata. Tras pasar toda la mañana andando, con alguna parada para comer o descansar, llegamos a la última aldea, donde nos esperaba el chofer que nos devolvería a Luang Namtha.

Al llegar a Luang Namtha, tocó despedirme del guía, y agradecerle todo lo que había aprendido con él.

TREKKING LUANG NAMTHA
  • Sin duda alguna, este trekking  fue de las mejores experiencias que vivimos en Laos. ¡Lo recomendamos 100%!

  • Debéis estar en buena forma física, hay tramos del trecking que son bastante exigentes.

  • En la mochila, ¡lo mínimo!

  • Ser respetuosos con la gente de las aldeas, tienen un estilo de vida totalmente diferente al occidental.